Se ha modernizado la instalación para evitar fugas de agua, optimizar la depuración, mejorar la eficiencia energética y ampliar la vegetación
El alcalde de Níjar, José Francisco Garrido, acompañado por los concejales de Urbanismo, Manuel Herrero, y de Deportes, Jesús Guerrero, ha visitado las instalaciones de la piscina municipal de la Villa de Níjar. Allí, ha comprobado de primera mano cómo ha quedado este espacio público tras las obras de renovación y mejora acometidas por el Ayuntamiento nijareño, invirtiendo para subsanar deficiencias como pérdidas de agua, al mismo tiempo que se ha optimizado el sistema de depuración y se ha mejorado la eficiencia energética. Igualmente, se han renovado las zonas verdes, con la plantación de una nueva capa de césped natural, así como nuevo arbolado.
Cabe señalar que esta piscina municipal se encontraba obsoleta en varios aspectos. Se trata de unas instalaciones ubicadas dentro de un complejo deportivo municipal que cuenta, además de la citada piscina, con campo de fútbol, pistas de tenis, pistas pádel, vestuarios, aseos, y zonas de aparcamiento. En ese sentido, el Ayuntamiento ha acometido una reforma integral de la piscina, que ha consistido en la renovación de revestimientos, creación de vaso de compensación, renovación del sistema de filtrado y desinfección, y renovación del área exterior.
Para evitar accidentes, el acceso al recinto de piscina se ha realizado a través de un vallado perimetral con zona de acceso. La cancela está dotada de sistema de cierre para evitar el acceso accidental. En cuanto al aforo máximo de usuarios, toda piscina pública vendrá limitada por una capacidad máxima de usuarios: dicho aforo será de una persona por cada dos metros cuadrados de lámina de agua en las piscinas al aire libre, según el artículo 3 del Reglamento. (Decreto 23/99). El vaso de recreo de la piscina de la Villa de Níjar tiene una lámina de agua de 271,05 metros cuadrados, por tanto, le corresponde un aforo de 135 personas.
Además, se han instalado duchas de regadera con grifo lava píes, con agua potable de la red de suministro público; el número de duchas es igual al número de escaleras del vaso —seis—. El plato de ducha es de material lavable, antideslizante y de fácil limpieza y desinfección, y cuenta con mecanismos adaptados a personas con discapacidad.